Sin categorizar

Lo inesperado puede ocurrir en cualquier momento. Si bien no debemos vivir con miedo a lo que podría suceder, debemos estar preparados para las posibilidades reales. La estrategia para afrontar una lesión comienza con la prevención. Si las probabilidades son desfavorables, necesitamos habilidades que nos permitan saber qué hacer. Los ojos son nuestro principal medio para percibir y comprender el mundo que nos rodea. Conocer las lesiones oculares comunes, incluyendo la prevención y los primeros auxilios, nos permitirá ahorrar tiempo y visión en caso de que se presente el peor escenario. 

Las lesiones oculares comunes incluyen objetos extraños en los ojos, golpes, heridas penetrantes, arañazos y abrasiones, quemaduras químicas y quemaduras solares. En caso de ataques repentinos, donde algo o alguien es responsable de la lesión, puede sentirse impotente en el momento. Reaccionar con rapidez podría aliviar los síntomas y permitirle volver a ver con claridad. Si bien la mayoría de las lesiones oculares por objetos extraños son leves, pueden provocar cicatrices e infección. La mejor medida de prevención es usar gafas protectoras al trabajar con madera, metal o practicar deportes donde puedan salir despedidos residuos. Enjuague el ojo con agua limpia o solución salina y evite frotarlo. Un golpe físico en el ojo puede consistir en un codazo, un puño o una pelota. Si bien esta situación suele ocurrir accidentalmente, la mejor prevención es usar gafas deportivas y estar muy atento a su entorno. Un remedio eficaz es aplicar una compresa fría, sin presión, para reducir el dolor y la hinchazón. Busque atención médica de emergencia si la visión es borrosa, sangrienta, descolorida o si un ojo sobresale más que el otro. Una lesión penetrante es la perforación o corte de la estructura ocular que puede causar pérdida de visión. Esto puede deberse a un objeto extraño o un golpe físico, pero también puede ser más grave, como fragmentos de vidrio que salen despedidos en un accidente automovilístico o la perforación de un anzuelo al pescar. Nunca desplace el objeto dentro del ojo y busque atención médica de emergencia de inmediato. 

Las abrasiones corneales pueden provenir de diversas fuentes, como uñas, ramas de árboles o el uso y cuidado inadecuados de lentes de contacto. Enjuague los ojos y parpadee con frecuencia para lubricarlos. Tenga cuidado al manipular productos químicos domésticos. Use gafas protectoras y siga las normas de seguridad al trabajar con sustancias peligrosas. Enjuague inmediatamente el ojo con agua fría y limpia durante al menos 15 minutos y busque atención médica. Proteja siempre sus ojos al aire libre, especialmente al sol y la nieve, con gafas de sol con filtro UV 100%. Descanse los ojos en una habitación oscura, use lágrimas artificiales y evite las luces brillantes. Los síntomas suelen desaparecer en 24 a 48 horas.
Mantener la calma y seguir adelante es la mejor opción para lesiones oculares comunes, prevención y primeros auxilios. A menudo, el instinto es entrar en pánico cuando ocurre algo inesperado. Respire hondo una o varias veces y siga los consejos anteriores. Busque atención médica de inmediato para garantizar la seguridad y calidad de su visión. Para una evaluación ocular, comuníquese con Pendleton Eye al 760-758-2008 o SITIO WEB.